jueves, 1 de marzo de 2018

La histórica e infravalorada Revolución Inglesa

Hasta el día de hoy no había escrito en este blog sobre uno de los acontecimientos más importantes de la historia y que a la vez está infravalorado. Me refiero, como no podía ser menos, a la Revolución Inglesa de 1642. Esa revolución que se produjo poco más de un siglo antes que la Revolución Francesa y que provocó ni más ni menos que el derrocamiento de la intocable monarquía inglesa y su sustitución por una república, la única que ha existido hasta el día de hoy en Gran Bretaña.

El motivo que me ha llevado a escribir sobre este acontecimiento histórico fue el hecho de ver por sexagésimo cuarta vez la impresionante película que en 1970 rodaron los insuperables Richard Harris y Alec Guinness. Esta película, llamada "Cromwell", relata la revolución británica desde el punto de vista del general Oliver Cromwell, y tiene a éste y al rey Carlos I de Inglaterra como los dos principales protagonistas. Esta película es una joya cinematográfica, ya que relata las disputas políticas entre el poder ejecutivo y el poder legislativo.

Desde que visualicé por primera vez esta película y comencé a indagar acerca de los sucesos ocurridos en la Inglaterra del siglo XVII siempre me he hecho la misma pregunta; ¿Por qué está tan infravalorada la Revolución inglesa y no se le da la misma importancia que a la Revolución francesa? Las personas a las que he preguntado siempre me han respondido lo mismo; "Porque las consecuencias de la Revolución inglesa no fueran tan determinantes para la humanidad como sí lo fueron las de la Revolución francesa". Estoy de acuerdo en todo esto, pero aun así considero que la historia tiene muy infravalorado este acontecimiento histórico, el cual supuso en realidad la primera revolución política contra el absolutismo monárquico.

¿Quién no ha visto alguna vez en las sesiones de apertura del parlamento inglés el momento en el que los parlamentarios dan con la puerta en las narices al emisario que anuncia a los comunes la llegada de la reina Isabel II? Esto por supuesto es una tradición, la cual se remonta al momento en que el rey Carlos I de Inglaterra acude al parlamento británico con el objetivo de detener a una serie de parlamentarios que habían pedido que el monarca cediese el poder absoluto en favor del parlamento. Cuando la noticia de que el rey llegaba al parlamento escoltado por guardias armados, la reacción de los parlamentarios fue la de cerrar las puertas al rey y a sus guardias, los cuales finalmente consiguieron echar la puerta abajo. Este suceso marca el inicio de la guerra civil inglesa y supone el principio del fin del reinado de Carlos I.

Remontándose un poco más atrás cabe añadir que el motivo por el que un grupo de parlamentarios exigía la cesión del poder absoluto del rey en el parlamento no fue otro que el hecho de que el monarca necesitaba dinero del estado para poder formar un ejército con el que combatir contra los escoceses, entonces abiertamente enfrentados contra los ingleses. Por ello una de las condiciones que el parlamento puso ante el rey fue la de ceder parte de su poder ante el parlamento, una condición que el rey no estaba ni muchísimo menos dispuesto a aceptar. Finalmente y tras una serie de conflictos entre el monarca británico y el parlamento, Carlos I decide disolver el poder legislativo, lo que unido a la escena anteriormente comentada provoca el estallido de la guerra civil en Inglaterra.

Este hecho sería aprovechado por un militar y parlamentario inglés llamado Oliver Cromwell para ponerse al frente del ejército que lucharía contra el rey. Aunque en la película "Cromwell", el general inglés es considerado como una persona de principios que lucha por la democracia, en realidad no fue más que un oportunista que vio el cielo abierto ante el poder despótico, tiránico, autoritario y absolutista que había llevado a cabo Carlos Estuardo durante todo su reinado. Podemos decir pues que Cromwell aprovecha la guerra civil inglesa para abrirse paso en la lucha de poder que en ese momento se está produciendo en Inglaterra entre las fuerzas del parlamento y las del rey.

Finalmente, Cromwell gana la guerra, y Carlos I es detenido, aunque conserva su título de rey de Inglaterra. Mientras esto sucede, se produce una serie de negociaciones entre el rey y el parlamento para discutir los términos de la paz. Llegado el momento y ante la sumisión de gran parte de los diputados con respecto al rey (El cual seguía siendo el perdedor de la guerra), Cromwell, como jefe del ejército, paraliza las negociaciones y establece que éstas se lleven a cabo directamente entre el rey y el ejército. Cuando esto sucede, Cromwell impone al rey unas condiciones que pasaban inevitablemente por la continuidad de la monarquía y de Carlos como rey, pero con la condición de que el rey cediese el poder soberano en el parlamento británico. El rey, antes de verse humillado en ese escenario, comienza en secreto a pactar con los irlandeses (Entonces enfrentados abiertamente contra Inglaterra) y con los católicos (Carlos era protestante y jefe de la Iglesia Anglicana, abiertamente enfrentada con la Iglesia Católica) para declarar una segunda guerra civil.

Cuando Cromwell recibe la noticia de los movimientos del rey, decide acusarlo de alta traición y juzgarlo. Una vez llegado el juicio, Carlos I se niega a reconocer la legalidad del tribunal y a responder a las preguntas que le formulan los integrantes de éste. Finalmente, y tras un largo proceso de deliberación en el que Cromwell jugó un papel activo y determinante en favor de una sentencia contra el rey, el tribunal decide condenar a muerte a Carlos I, el cual acabará siendo decapitado el 30 de enero de 1649. Con este histórico suceso se produce la que ha sido hasta el día de hoy la única ejecución contra un rey de Inglaterra en manos de sus súbditos. Finalmente, y tras la ejecución de Carlos Estuardo, se produce la proclamación de la República parlamentaria inglesa.

Tras esto, Cromwell invade con éxito Irlanda y Escocia, siendo hasta la fecha muy discutida la actuación del general inglés en ambas guerras. Algunos llegan a considerar que Cromwell cometió un genocidio contra los irlandeses y escoceses durante este periodo bélico. Finalmente y tras rechazar el ofrecimiento del parlamento de convertirse en rey (Aunque algunos consideran que lo deseaba activamente), la situación parlamentaria en Inglaterra se vuelve cada vez más insostenible. Escenario que Oliver Cromwell aprovecha para dar un golpe de estado y erigirse como "Lord Protector" de la república inglesa, una especie de rey sin corona. Algunos consideran que el protectorado de Cromwell fue uno de los periodos más ejemplarizantes de la historia inglesa, mientras que otros lo catalogan como uno de los periodos más oscuros, donde Cromwell superó incluso el despotismo de Carlos I. Finalmente, este gobierno liderado por Cromwell se mantendría hasta su muerte en 1658, sólo cinco años después de su golpe de estado. Como si de una monarquía republicana se tratase, su hijo, Richard Cromwell, le sucedió como lord protector de Inglaterra, aunque por poco tiempo. Sólo un año después renunciaría a su cargo, mientras que al año siguiente, en 1660, la república quedaría abolida y la monarquía volvería a ser instaurada nuevamente, esta vez con el hijo mayor de Carlos I; Carlos II de Inglaterra. Desde entonces, la monarquía inglesa no ha vuelto a ser derrocada ni la república proclamada nuevamente en Inglaterra.

Con esto he intentado comentar de manera resumida uno de los periodos más interesantes, no sólo de Gran Bretaña, sino del mundo. Un periodo que sirvió como ejemplo para los revolucionarios en Francia un siglo después, los cuales tomaron nota de los errores que se llevaron a cabo durante esta histórica revolución para no fracasar ellos del mismo modo. La revolución inglesa supone pues el primer enfrentamiento entre el absolutismo monárquico y los partidarios de la democracia y la separación de poderes. Un enfrentamiento que en realidad no era más que la lucha legítima de dos posiciones bien diferentes; Por un lado la del rey Carlos I en su creencia de la legitimidad de su poder absoluto, y por otro el de los defensores de la democracia, que ansiaban una Inglaterra nueva y moderna que dejase atrás el Antiguo Régimen personificado en Carlos I. Por supuesto, dentro de esos defensores de la democracia no incluyo a Oliver Cromwell, el cual reitero que no fue un demócrata, ya que instauró una dictadura absolutista en nombre de la democracia y la libertad. Cromwell fue un oportunista que al igual que muchos otros parlamentarios, ansiaban el poder y buscaban solamente la caída del rey para erigirse ellos con el poder absoluto. Sólo el general y parlamentario inglés fue capaz de alcanzar ese poder, siendo su ambición lo que condujo al fracaso a una de las revoluciones más importantes que ha tenido la historia del mundo. 

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