viernes, 16 de marzo de 2018

La hipocresía de los nuevos fariseos

Hace un par de semanas, iba por la calle y me pararon dos señores que afirmaban ser Testigos de Jehová. Como es natural en las personas que pertenecen a esta religión, me empezaron a hablar sobre la esperanza de un mundo mejor y cosas por el estilo. Aquellos que me han leído sabrán que soy una persona fervientemente creyente, pero tengo mis teorías personales acerca de dichas creencias. En este blog he escrito dos veces sobre mi teoría acerca de la procedencia de Dios y Jesucristo y la posibilidad de que Ellos sean seres provenientes de una civilización extraterrestre. Pues bien, aprovechando ese inesperado debate, les comencé a hablar a estos señores sobre esta teoría y les pregunté qué opinaban de ella. Los dos señores comenzaron a responderme literalmente con textos de las Sagradas Escrituras. Yo por mi parte les insistí y ellos continuaron con el mismo proceder a la hora de responderme. Finalmente, tras mucho insistir, ellos me contestaron directamente que no creían en civilizaciones extraterrestres, a lo que yo les contesté; Si se confirma que Jesucristo es un ser proveniente de una civilización ajena a la tierra, ¿Ustedes seguiríais creyendo en Él? No hubo respuesta alguna por parte de los dos, sólo respuestas ambiguas. Tras esto, yo continué defendiendo mi teoría, la cual era rebatida por ellos, hasta que llegado un momento de la conversación y al verse sin más argumentos con los que defenderse ante mi teoría, estos señores deciden poner fin a la conversación y me despiden respetuosamente. Creo que es la primera vez en la historia de la humanidad en la que Testigos de Jehová despiden a alguien y no al revés.

Dejando la ironía a un lado, este hecho me ha demostrado que gran parte de las personas creyentes, no lo son en realidad. Y no lo son por los siguientes motivos; Cuando alguien pregunta sobre si creerían en Dios o en Jesucristo en el supuesto de que Ellos no sean como la Biblia describen, la respuesta es ambigua o es nula. ¿Por qué? Señores, si somos creyentes, debemos creer independientemente de cómo sea el Ser Supremo en el que nosotros creemos. La misma pregunta que les plantee a estos dos señores, se la hice a tres personas también miembros de Testigos de Jehová (Debo añadir que soy Cristiano y Católico, aunque no practicante, ya que como he dicho en otras entradas, no creo en la Iglesia). Pues bien, cuando les hice esta pregunta a estas tres personas, las tres se quedaron igualmente calladas. Lo cual me dejó un poco impresionado, ya que creía que me responderían con un sí rotundo. A partir de entonces, y estamos hablando de febrero del año 2012, comencé a pensar que las creencias de algunas personas no era tan fuerte o tan verdadera como ellos afirmaban.

Lo ocurrido hace un par de semanas me corrobora lo que ya empecé a sospechar tras la conversación mantenida con los otros Testigos de Jehová en febrero de 2012; Existen falsos creyentes que afirman creer en Dios, pero sólo si Dios es exactamente como describen las Sagradas Escrituras. Si Dios fuese diferente a la forma en la que todos hemos creído siempre que era, su Fe se desvanece tan rápido como se desvanece el cuerpo humano cuando llega al borde de sus fuerzas físicas. Siendo así, ¿Qué clase de Fe es la de esta sociedad?, ¿Acaso no debemos amar y aceptar a Dios independientemente de cómo sea Él?, ¿Quién coño somos nosotros para rechazar a Dios si no es como nosotros creemos que es?, ¿Acaso Dios nos rechaza por ser nosotros como somos?, ¿Cómo puede el ser humano llegar a ser tan miserable?. Parece mentira que aquellos que hablan de aceptar a Dios sean los primeros en rechazarlo si la verdad es distinta a la que todos creemos que es. Ya dije en la entrada que escribí en enero de este año, y se lo dije a estos señores, que debemos seguir el mensaje de Jesús, el Cual dijo; "Buscad la verdad, porque ella os hará libres", a lo que ellos me respondieron; "La verdad está en la Biblia".

Los judíos rechazaron a Jesús por el simple hecho de que no creían que el Mesías fuese el hijo de un carpintero que hablase de paz, armonía y entendimiento entre los hombres. Al contrario, creían que sería un príncipe el cual traería la espada para aplastar a Roma y al resto de las naciones, y glorificar a Israel por encima de las demás, como "Pueblo elegido por Dios". A día de hoy, los judíos siguen sin creer en Él. 2018 años después de su estancia en el mundo, aquellos que se hacen llamar a sí mismos "Creyentes", son los primeros en dudar de su Fe si la verdad es distinta a la que ellos creen. Siendo así me pregunto; ¿Si finalmente fuese cierto que Cristo y María Magdalena mantuvieron una relación sentimental y tuvieron descendencia, seguirían creyendo estos falsos creyentes en Él? Por supuesto que no. El mundo está repleto de hipócritas, que no aceptan a Dios y/o a Jesús si fuese distinto a como hemos creído siempre que era Él. Por sorprendente que nos parezca, Cristo sigue siendo, por desgracia, rechazado por la humanidad, incluso por aquellos que sermonean a los demás haciéndoles creer que Dios y Jesús son como ellos creen que son, y no como puedan ser en realidad. Jesucristo dijo cuando fue alzado en la cruz; "Padre, perdónales, porque no saben lo que hacen". Estoy convencido de que ahora Él le dirá a su Padre esas mismas palabras.

En una de mis últimas entradas hablé acerca del Papa Francisco y de la hipocresía que rodeaba a este Papa y a todos sus antecesores en una Iglesia que le ha dado la espalda a Dios. Por lo cual llegados a este punto cabe preguntarse; ¿Dónde está la verdadera Fe?, ¿En esa Iglesia convertida en la nueva Sodoma y Gomorra?, ¿En esos falsos creyentes que sólo creen aquello que ellos quieren creer?, ¿En esas religiones que se enriquecen a costa de Dios mientras reniegan de Él y de su palabra?. Por ello me reafirmo en lo que ya he dicho en otras ocasiones; Creo única y exclusivamente en Dios y en Jesucristo, sean como sean. No creo en ninguna Iglesia, y no creo en ninguna religión que cree fervientemente que Dios es de una forma concreta, y si es de otra diferente, entonces no reconocen a Dios como tal. No señores, Dios nos ama y nos acepta tal y como somos. Si nosotros queremos ser llamados verdaderamente "Hijos de Dios", debemos amarlo a Él y aceptarlo independientemente de como sea. ¿Quiénes somos nosotros para juzgar a Dios?. Sólo Él tiene la capacidad para juzgarnos, y el día que eso ocurra y debamos dar cuenta de nuestros actos en la vida, muchos se llevarán entonces las manos a la cabeza y se lamentarán de no haber creído verdaderamente en Él.

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