Y es que hoy la Audiencia de Sevilla ha publicado por fin la sentencia del caso de los ERE del PSOE. Un caso de corrupción que perfectamente se puede calificar como el más grave ocurrido en cuarenta años desde la aprobación de la constitución española en 1978. Un caso de corrupción que está catalogado como el mayor de todos los conocidos dentro de los países de la Unión Europea. Un caso de corrupción en el que durante más de una década, la Junta de Andalucía, dirigida entonces por los socialistas Manuel Chaves y José Antonio Griñán, abrió y mantuvo un sistema paralelo y fraudulento de subvenciones destinadas legalmente para empresas en periodos de crisis. Ese sistema paralelo, que escapaba de cualquier control fiscal, fue destinado a empresas ajenas y a organizaciones sin ningún tipo de actividad empresarial ni laboral durante más de diez años, con la aprobación de los altos cargos de la Junta de Andalucía, que hasta este año ha estado presidido ininterrumpidamente por el Partido Socialista Obrero Español.
Pues bien, hoy la Audiencia de Sevilla ha confirmado estos hechos gravísimos, los cuales ascienden a más de 600 millones de euros (2.000 millones de euros en total si añadimos el caso de los cursos de formación, pertenecientes también al PSOE andaluz), y ha condenado a seis años de cárcel al ex-presidente del PSOE y ex-presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, por delito de malversación, y a quince años de inhabilitación por delito de prevaricación. Por otra parte, el también ex-presidente del PSOE y ex-presidente de la Junta de Andalucía durante casi veinte años, Manuel Chaves, ha sido condenado a nueve años de inhabilitación por delito de prevaricación. Por otro lado, la ex-ministra de fomento en el gobierno de Zapatero, y ex-consejera de hacienda en el gobierno de Chaves, Magdalena Álvarez, ha sido condenada a diez años de inhabilitación por delito de prevaricación. El que fuera presidente de la Junta de Andalucía en funciones tras la dimisión de Chaves en 2009 y consejero de presidencia durante más de doce años, Gaspar Zarrías, ha sido condenado a diez años de inhabilitación por delito de prevaricación. El que fuera consejero de empleo en el gobierno de Chaves, José Antonio Viera, ha sido condenado a ocho años de cárcel e inhabilitación por delito de malversación, así como a diez años de inhabilitación por delito de prevaricación. El director general de la Junta, Francisco Javier Guerrero (El mismo que se hizo público que se gastaba el dinero desviado de los ERE en putas y cocaína) ha sido condenado a ocho años de cárcel e inhabilitación por delito de malversación, y a diez años de inhabilitación por prevaricación.
Como se puede ver, toda una red mafiosa y clientelar la organizada por el PSOE, que ha estado pulando por estas tierras a lo largo de cuarenta años y que actualmente ocupa el gobierno de España desde hace año y medio con motivo de una moción de censura que este mismo partido presentó contra el gobierno del PP tras la sentencia por corrupción del caso Gürtel. Una sentencia que según los propios socialistas presentaron por "Dignidad" y para "Limpiar y regenerar las instituciones". Como se puede comprobar, ya hemos visto qué tipo de limpieza y regeneración han realizado estos chorizos durante todo este periodo. Pero por si no fuera poca la vergüenza que debería de sentir en estos momentos el partido en el gobierno, esta tarde ha salido ni más ni menos que el ministro de fomento y secretario de organización del PSOE, José Luis Ábalos para señalar que la grave sentencia de hoy "No es un caso del PSOE, sino de antiguos responsables públicos de la Junta de Andalucía". Tócate los cojones, María Manuela. Ya se sabía que la cara de estos hijos de puta era bastante dura, pero no sabía que lo fuesen de hormigón. La gravedad de lo ocurrido hoy, que por otra parte cabe decir que no es más que otra humillación a la ciudadanía, ya que la sentencia es un insulto, puesto que la mayoría de los acusados han sido inhabilitados y no encarcelados, debería haber supuesto que hoy el presidente del gobierno en funciones y líder del PSOE, Pedro Sánchez, así como la líder del PSOE en Andalucía y ex-presidenta hasta este año de la Junta, Susana Díaz, hubiesen presentado de forma inmediata su dimisión. Unas dimisiones que por supuesto ni están ni se les esperan, aparte de que ningún líder político las ha exigido, lo cual me parece vomitivo y repugnante.
¿Cuánto tiempo tardó el entonces líder de la oposición, Pedro Sánchez, en exigir la dimisión inmediata del entonces presidente del gobierno, Mariano Rajoy? Antes de que la sentencia se terminase de leer ya estaban desde la calle Ferraz exigiendo el fin del gobierno del PP. Un fin de gobierno que yo también defendí, como ahora defiendo enérgicamente el fin del gobierno de Pedro Sánchez. Un Pedro Sánchez al que ahora hay que decirle que si él sigue siendo presidente del gobierno, el coste para nuestra democracia y para la institución que quieres representar es enorme. Porque el presidente del gobierno debe ser una persona decente, y tú no lo EREs. ¿Recuerdas estas palabras, señor Sánchez? No son mías, son tuyas. Se las dijiste a Rajoy en el famoso y polémico debate de televisión de hace cuatro años. Si tuvieras los cojones que debe tener un hombre que se viste por los pies, habrías anunciado hoy mismo tu dimisión tanto al frente del gobierno, como al frente del PSOE. Y no lo has hecho por la sencilla razón de que eres un sinvergüenza, un psicópata y un hijo de puta, capaz de llevarse a España y a los 47 millones de habitantes que poblamos esta nación por delante antes que renunciar al cargo por el que tanto has peleado por llegar.
Pero no solo eso. Lo peor de todo esto es que los españoles hemos conocido esta sentencia una semana y un día después de celebrarse las elecciones generales, ya que el gobierno del PSOE presionó al sistema judicial para retrasar el fallo hasta después de los comicios, con el fin de que la sentencia no interfiriese en los españoles a la hora de votar. Un motivo más que suficiente para que los líderes políticos exigiesen la dimisión del presidente del gobierno y su renuncia a formar nuevo gobierno, cosa que como he dicho antes, no ha ocurrido. De hecho la reacción de Pablo Iglesias tras la publicación del fallo ha sido la de echar balones fuera y culpar al bipartidismo, no al PSOE, sino al bipartidismo de los graves casos de corrupción que ha sufrido España en estos años. Por ello, ha añadido el dirigente podemita, la solución es que entren ellos en el gobierno junto al PSOE de Sánchez para eliminar dicha corrupción. Menudo impresentable eres, Pablito Iglesias. ¿Dónde está tu discurso de hace cinco años de "La casta" y "PPSOE"?. ¿Acaso el PSOE ya no es casta y Sánchez ya no es ese vil ex-consejero de Caja Madrid que aprobó las tarjetas black de Miguel Blesa?, ¿Acaso no es ya Sánchez ese diputado sin principios que votó a favor de la reforma del 135 de la constitución en 2011? En fin, qué se puede esperar de alguien que se enorgullece de llevar el nombre y apellido de un criminal marxista que alentaba atentar y asesinar a todos los contrarios a sus ideas. Si a Rajoy había que echarlo, y muy merecidamente, por los 300 millones de euros de la Gürtel, a Sánchez podemos perdonarle los 2.000 millones de euros de los ERE y de los cursos de formación, ¿Verdad, Pablo? Todo sea con tal de alcanzar la vicepresidencia, ya que el palacete de Galapagar no se paga solo. Y la sed de poder, unida a la falta de escrúpulos tanto tuya como de Sánchez no tiene límites.
Llegados a este punto, ¿Qué habría que hacer? En mi opinión, que el rey se decante por no convocar la ronda de consultas hasta pasado, valga la redundancia, Reyes del año que viene. ¿Por qué hasta Reyes? Pues porque es necesario que por una puñetera vez el rey asuma su responsabilidad constitucional y afronte el grave escenario que estamos viviendo. De aquí a dos meses el rey debería consultar más allá de los principales líderes políticos a personajes relevantes y de gran talla de la cultura, la educación, la medicina, o incluso si me apuran hasta de los deportes que reunan si no el apoyo mayoritario, sí el apoyo de la mitad de la cámara para ser investido presidente del gobierno, aunque dicha investidura resultase fallida. Una vez aquí, y tal y como establece el punto 5 del artículo 99 de la constitución, esperar a que se consuma el periodo de dos meses para la formación del gobierno. Una vez llegados a este punto, el rey debería renunciar a convocar una nueva ronda de consultas y firmar el decreto de nuevas elecciones generales. De esta forma los españoles irían esta vez a las urnas con el conocimiento de la sentencia que se ha publicado hoy y votarían en consecuencia con el escenario que se encuentren entonces. ¿Es posible que los españoles, como masoquistas que son, vuelvan a votar al PSOE? Estoy convencido de que sí, pero de esta forma la gente acudirían de nuevo a votar sin maniobras ni juegos sucios por parte del partido en el gobierno. Una vez transcurrido el recuento electoral, que gane quien tenga que ganar y que gobierne quien tenga que gobernar, pero en estas circunstancias el PSOE no puede seguir gobernando ni Pedro Sánchez está capacitado para seguir gobernando. Lo lógico en este caso sería o bien la dimisión del presidente del gobierno, o bien la convocatoria de unas elecciones generales, o bien la presentación inmediata de una moción de censura. Pero como estamos en un escenario postelectoral, la única forma para que Sánchez y el PSOE asuman su responsabilidad es a través de la intervención de Felipe VI, para que con utilización de sus escasas funciones constitucionales, los españoles podamos ir de nuevo a las urnas.
Debo añadir que, al igual que con la sentencia del Proces, el fallo de hoy corrobora nuevamente el fracaso del sistema político y judicial en su conjunto. En ningún país teóricamente democrático se puede permitir que políticos de primer nivel no sean condenados a prisión por malversación, y que solo los actores secundarios o terciarios sean quienes vayan a parar entre rejas. Por cierto, unas penas de cárcel que son la mitad de la mitad de las que en su día se ejecutaron contra Bárcenas, Correa, etc, siendo los ERE un caso de corrupción que duplica en cantidad económica el dinero malversado en el caso Gürtel, pero como ya he dicho este mediodía por Twitter, en España la "Justicia" penaliza más robar con la diestra que con la zurda. Por este y otros muchos motivos, la sentencia de hoy no ha tenido ni la repercusión mediática, ni las consecuencias políticas que en su día se produjeron con la sentencia de la Gürtel, lo cual no quita que los ERE del PSOE sea un caso de corrupción más grave que el de la Gürtel del PP, por mucho que los "Periodistas" lacayos serviles al PSOE se nieguen a aceptarlo.
Decir por último que no hay que ser muy listo para darse cuenta de las consecuencias políticas que va a tener esta grave sentencia: Cero. De momento ni el presidente del gobierno ha comparecido ni la líder del PSOE andaluz, ex-presidenta de la Junta, ahijada política y sucesora de Griñán, Susana Díaz, ha anunciado su dimisión al frente del PSOE de Andalucía, lo cual es todo un indicador de que no se va a depurar ninguna responsabilidad ni en Madrid ni aquí en Sevilla, ni por supuesto habrá concentraciones frente a las sedes del PSOE ni se devolverá el dinero robado. Esto es España y esto es el PSOE, un partido criminal y asesino que después de 140 años de historia continúa sobreviviendo y protegiéndose de las altas traiciones de sus líderes al país y de la corrupción de esta formación a la nación. De hecho, con esta sentencia, sumadas a las del caso Filesa en los 90 se corrobora una vez más que el PSOE es el partido más corrupto de España, por mucho que la Sexta intente ocultarlo hablando de Franco día sí y día también. Tras lo ocurrido hoy, Pedro Sánchez no puede seguir al frente de España, ni el PSOE dirigiendo el gobierno de la nación, ni Susana Díaz seguir liderando el PSOE de Andalucía tras hacerse pública la sentencia del que insisto, es el mayor caso de corrupción de la historia reciente de España y de la Unión Europea. A partir de mañana (Ya hoy debiera haber ocurrido) deberían de depurarse responsabilidades de arriba a abajo, pero no se hará, porque hablamos del PSOE y hablamos de España, ese país que algunos claman de forma orgullosa e ignorante cada vez que este maldito partido gana las elecciones "Es socialista".