El presidente del gobierno ha jugado un papel clave en este proceso y no puede salir indemne de el. Ya dije hace unos meses, cuando se confirmó la venta del armamento a los catalanes por parte del gobierno, que los sucesos de violencia que ocurriese a partir de entonces en Cataluña serían corresponsabilidad directa del actual jefe del gobierno por permitir semejante traición sin precedentes a España y a la ciudadanía española. Hoy me reitero en ello, y espero que Sánchez pague muy duramente en las urnas y en la justicia esta terrible traición, la cual ha comenzado ya a surtir sus efectos con los planes del CDR por atentar en Barcelona. Ojalá la situación no vaya a más y España no se vea abocada a padecer por segunda vez en su historia la barbarie terrorista. Ya se ha pagado y se sigue pagando un precio bastante alto por el no-fin de ETA, la cual se encuentra en estos momentos cogobernando en Navarra con el PSOE y gobernando los ayuntamientos e instituciones en el País Vasco gracias a las famosas negociaciones miserables que ese ser perverso llamado José Luis Rodríguez Zapatero acordó con la banda terrorista hace ya poco más de diez años. Ahora tenemos a otro ser igual de perverso en la presidencia del gobierno, el cual por seguir en el poder es capaz de todo, incluso de armar a los enemigos de España para que atenten contra los ciudadanos. Todo es aceptable para Sánchez con tal de seguir gobernando. Ese Sánchez el cual Pedro J. Ramírez catalogó el año pasado como el "Aznar de la izquierda", ya que según él, Rajoy representaba lo mismo que Felipe González en los 90: La corrupción, mientras que Sánchez representaba tras alcanzar la Moncloa lo mismo que Aznar cuando llegó al gobierno en 1996: La regeneración democrática. Pues bien, se puede confirmar que Sánchez no sólo no representa ninguna regeneración democrática, sino que es la personificación de la peor y más peligrosa clase política que ha gobernado España desde hace un siglo.
Un claro ejemplo de la nula moralidad que poseen estos hijos de puta es la noticia que mañana publica "El Mundo", donde se señala que el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, abroncó a la Guardia Civil tras la detención de los miembros terroristas del CDR. Se ve que la prioridad máxima del ministro del Interior es aumentar los asesinatos y el terrorismo en España en lugar de acabar con ellos. En fin, una prioridad bastante anómala en el principal responsable en velar por la seguridad de los ciudadanos, pero eso en el gobierno de Sánchez no importa. Todo es anómalo y perjudicial en este insulto a la ciudadanía que llevamos padeciendo desde hace un año y que se hace llamar "Gobierno progresista". Un gobierno que sin lugar a dudas es ya el peor gobierno que ha tenido España desde su fundación por los Reyes Católicos. Y mira que nuestra nación se ha caracterizado por tener a traidores y miserables gobernándola, sin ir más lejos el ex-presidente del gobierno, Mariano Rajoy, el cual también es corresponsable de la deriva terrorista que estamos padeciendo al no hacer absolutamente nada (Aparte de fumarse un puro) mientras la situación en Cataluña se ha ido agravando en estos años. Ahora ya todo es inútil. Entre la traición de unos y la colaboración de otros, España se encuentra cada vez más arrinconada y agonizante tras ser apuñalada reiteradas veces por los sucesivos gobiernos que llevamos padeciendo en estos cuarenta años, sobre todo con los tres últimos (Zapatero, Rajoy y Sánchez).
Pero aquí no acaba la historia. Si no teníamos ya poco con encontrarnos ante el nacimiento de un nuevo grupo terrorista, ayer nos encontramos con la noticia que todo el mundo llevaba tiempo esperando. Una noticia por la que los españoles llevábamos años sin poder dormir y que pensábamos las 24 horas del día en que en algún momento se hiciese realidad, ya que era lo que más nos importaba por encima de todo: Franco por fin saldrá del Valle de los Caídos, según dictaminó ayer el Tribunal Supremo. Sí, señores. Esto es lo que según el gobierno de traidores que tenemos es lo que verdaderamente cuenta e importa en estos gravísimos momentos. Nada de terrorismo, nada de crisis económica inminente, nada de nada, como diría nuestra querida Cecilia. Lo importante es una vez más Francisco Franco Bahamonde. Ese señor que lleva fallecido cuarenta y cuatro años pero que para los fascistas de la izquierda es lo verdaderamente urgente. Buena prueba de ello son las declaraciones de la vicepresidenta Carmen Calvo, afirmando ayer que por fin los españoles se podrán despertar sabiendo que Franco no sigue enterrado en el Valle de los Caídos... asco y vergüenza es poco a la hora de definir semejantes palabras provenientes de este ser vomitivo repleto de odio. También el discurso de ayer de Sánchez en la ONU alegando que con la exhumación de Franco se cierra una etapa de la historia de España y también el círculo democrático en nuestro país es otra prueba de la realidad paralela en la que vive este peligroso psicópata, narcisista y ególatra, al cual hay que echar cuanto antes de la Moncloa por el bien del país y de la seguridad de los ciudadanos, la cual se encuentra en peligro mientras este sinvergüenza continúe cediendo armamento a aquellos que luego lo van a utilizar para realizar acciones terroristas.
Por otra parte hay que decir algo que parece que los rojos, progres y demás fascistas han olvidado. La sentencia del Tribunal Supremo no supone que la salida de Franco del Valle de los Caídos se vaya a producir con efecto inmediato, ya que la familia del fallecido ya ha anunciado que recurrirán el fallo del Tribunal Supremo al Tribunal Constitucional e incluso al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, lo cual equivale a que la exhumación se retrasará aún más, a menos que Sánchez desee hacer caso omiso al recurso de la familia y basándose en el fallo del Supremo decida desenterrar a Franco para ofrecérselo como trofeo a sus votantes estúpidos. Algo que por supuesto sería ilegal, pero que a Sánchez le da exactamente igual. De nada le importa que el procedimiento judicial siga su curso y debe respetarlo, de nada le importa que los monjes benedictinos se oponen a la exhumación del cadáver, el cual se encuentra en el recinto que es propiedad de ellos. Qué más le da a Sánchez todo eso, cuando lo único que le importa a él es sacar al difunto de la losa para provocar un aumento de la tensión social de aquí a las elecciones. ¿Se acuerdan de Zapatero?, aquello de "Nos conviene que haya tensión". Pues el alumno Sánchez ha seguido a rajatabla las directrices de su maestro, principal responsable de la situación actual que estamos viviendo con este asunto y con otros muchos. Ignoro si finalmente se sacará a Franco del Valle de los Caídos de aquí al 10-N, pero desde luego Sánchez ya ha conseguido el impacto y la división social que él quería sacar con este tema una vez más. De hecho, si consigue sacarlo antes de las elecciones y en medio de la reacción en Cataluña tras la sentencia del proces, puede crear la tormenta perfecta para que caigan aquí las siete plagas dentro de unas semanas. Así que más le valdría a este ser miserable que se hace llamar incesantemente "Presidente del gobierno" que se ande con cuidado con las decisiones que toma, porque puede que de mucho querer estirar la cuerda de la tensión, consiga romperla... a menos que sea eso lo que quiere, que viniendo de semejante cerdo es bastante posible. Pero bueno, por mucho que desentierren muertos e intenten crear una historia inventada, lo cierto es que estos fascistas perdieron la guerra, y eso no hay libros, ni películas manipuladas y subvencionadas de Amenabar, ni muertos desenterrados que lo hagan cambiar. Por cierto, tanto odian a Franco que finalmente están llevando a cabo sus últimas voluntades, que no eran otras que la de no estar enterrado en el Valle de los Caídos. Esto es lo que ocurre cuando aparte de totalitarios y profanadores son imbéciles.
Por último destacar la que sin duda ha sido otra de las noticias de estos días, que no es otra que la confirmación por parte de un muchacho hasta ahora desconocido que ha anunciado su candidatura a las elecciones de noviembre. Un tipo llamado Íñigo Errejón, el cual va a liderar un partido de izquierdas que va a traer aire fresco a la política española. Ya era hora de que esto sucediese, ya que España está exenta de partidos de izquierdas y progresistas. Como se puede comprobar, aquí todo está minado por partidos "Fachas". Desde el PSOE hasta Podemos, pasando por C's y PP. Menos mal que la presentación de este muchacho, el cual es una incógnita porque no sabemos ni cuáles son sus ideas ni si cobraba o no becas durante su época de estudiante... En fin, dejando a un lado la ironía, que creo que es lo que mejor podemos hacer a estas alturas de la película, debo decir que la confirmación de este tipejo no es otra cosa que la alternancia auspiciada por el PSOE y por Sánchez para lograr el apoyo de Errejón tras las elecciones generales del 10-N.
La jugada del presidente del gobierno en funciones de ir de nuevo a las urnas puede salirle rana si la izquierda decide abstenerse o directamente no ir a votar. De este modo han comenzado a sacar a relucir la operación para que aquellos imbéciles que aún creen en la posibilidad de un "Gobierno de izquierdas" o "Gobierno de progreso" acudan a votar en masa a Errejón en detrimento de un Iglesias que cada vez está más solo y debilitado, el cual solo espera a que su parienta le de la estocada final para sustituirle al frente de Podemos tras los malos resultados que se llevará en noviembre. Podemos decir pues que Errejón será el muñeco de trapo que utilizarán para decirle a Sánchez "Sí bwana" a todo lo que el presidente en funciones le proponga al cofundador de Podemos. Sánchez sabe que Errejón tragará con todo lo que él le eche con tal de pillar una poltrona, quién sabe si en el gobierno, o quién sabe si a cambio de algún precio menor. Pedro Sánchez ha sabido desde siempre que Errejón no era Pablo Iglesias. Ya de hecho, el nuevo candidato ya discrepó seriamente con Iglesias cuando el líder podemita se negó a llevar a Sánchez a la Moncloa en 2016 en pos del sorpasso que finalmente no se produjo en las elecciones generales de junio, lo cual fue determinante para que en 2018 Iglesias accediese a llevar esta vez sí a Sánchez a la Moncloa a cambio de nada... hasta que llegaron las fallidas negociaciones postelectorales de este año donde se quiso cobrar lo que no se cobró el año pasado. Por estos motivos, a Sánchez le conviene un Errejón obediente que un Iglesias desafiante cada dos por tres. De siempre se dijo que Errejón acabaría dentro del PSOE, lo cual puede confirmarse si tal y como parece ser, el ex-podemita accede a investir nuevamente a Sánchez tras los comicios, lo que se podría traducir como la antesala a su entrada en el PSOE.
La jugada del presidente del gobierno en funciones de ir de nuevo a las urnas puede salirle rana si la izquierda decide abstenerse o directamente no ir a votar. De este modo han comenzado a sacar a relucir la operación para que aquellos imbéciles que aún creen en la posibilidad de un "Gobierno de izquierdas" o "Gobierno de progreso" acudan a votar en masa a Errejón en detrimento de un Iglesias que cada vez está más solo y debilitado, el cual solo espera a que su parienta le de la estocada final para sustituirle al frente de Podemos tras los malos resultados que se llevará en noviembre. Podemos decir pues que Errejón será el muñeco de trapo que utilizarán para decirle a Sánchez "Sí bwana" a todo lo que el presidente en funciones le proponga al cofundador de Podemos. Sánchez sabe que Errejón tragará con todo lo que él le eche con tal de pillar una poltrona, quién sabe si en el gobierno, o quién sabe si a cambio de algún precio menor. Pedro Sánchez ha sabido desde siempre que Errejón no era Pablo Iglesias. Ya de hecho, el nuevo candidato ya discrepó seriamente con Iglesias cuando el líder podemita se negó a llevar a Sánchez a la Moncloa en 2016 en pos del sorpasso que finalmente no se produjo en las elecciones generales de junio, lo cual fue determinante para que en 2018 Iglesias accediese a llevar esta vez sí a Sánchez a la Moncloa a cambio de nada... hasta que llegaron las fallidas negociaciones postelectorales de este año donde se quiso cobrar lo que no se cobró el año pasado. Por estos motivos, a Sánchez le conviene un Errejón obediente que un Iglesias desafiante cada dos por tres. De siempre se dijo que Errejón acabaría dentro del PSOE, lo cual puede confirmarse si tal y como parece ser, el ex-podemita accede a investir nuevamente a Sánchez tras los comicios, lo que se podría traducir como la antesala a su entrada en el PSOE.
Personalmente no creo que Sánchez consiga un resultado arrollador (Aunque de los españoles ya me espero cualquier cosa y no precisamente buena), lo cual le obligaría a pactar con el veleta oficial del Reino (Albert Rivera) y con Errejón, al cual ya están dibujando algunos como la "Cara amable y moderada de la izquierda", como si la izquierda tuviese un lado amable y moderado... en resumen, creo que conociendo a Riveleta y tras la humillación a Iglesias y el enaltecimiento de Errejón, el acuerdo de gobierno podría ser perfectamente entre PSOE, C's y el partido de Errejón, al cual no creo que ponga impedimento alguno Rivera, ya que como acabo de decir, ya se está definiendo a Errejón como un personaje moderado en comparación con Iglesias. De todas formas, si Riveleta pusiese obstáculos ya recibiría la llamada correspondiente de Soros, Macron o algunos de sus jefes de la Logia para corregirlo. Es lo que tiene dirigir un partido títere... Por cierto, volviendo a Errejón debo decir que es bastante curioso el lema de su partido, el cual no es otro que "Más País", lo cual no deja de tener su gracia. Errejón, el cual se presentó en mayo para la comunidad de Madrid con el lema "Más Madrid", ahora prefiere ignorar la palabra España en su nuevo lema a nivel nacional. Es lógico, para ellos decir España es casi como decir "El socialismo es un fracaso", osea, una palabra prohibida. que solo puede salir de un franquista. Es normal que para estos seres despreciables lo normal sea decir "País" antes que "España" por temor a que la inclusión del nombre de su nación suene demasiado facha y acaben por no votarles nadie.
Y para terminar un pequeño aviso a aquellos imbéciles de la derecha que ya sueñan viendo a Casado en la Moncloa gracias a la irrupción de Errejón para el 10-N. El hecho de que el de la beca se presente a las elecciones y provoque que haya un partido más en la izquierda no es sinónimo de que ésta vaya a dividirse. Sánchez será todo lo que podamos decir de él, pero imbécil no es. Si ha promocionado la candidatura de Errejón es porque sabe que el electorado que le vote será casi con toda seguridad el de Podemos y no el del PSOE, salvo alguna que otra excepción, por lo cual lo único que puede producirse es que los votos cosechados por Iglesias vaya a parar a Errejón, lo cual le podría dar a Sánchez los números suficientes para pactar con él y Rivera. Que nadie se engañe, Rivera pactará con Sánchez en cuanto le sea posible. De esta forma se asegurará nuevamente ser el "Garante de la estabilidad" y venderá su discurso de que gracias a él no habrá unas terceras elecciones. E incluso llegado el caso, si la suma entre C's y Errejón con Sánchez no suma, ya comenzará Casado a recibir las presiones por parte de Feijoo y demás gentuza para que se abstenga y permita gobernar a Sánchez. Esto y no la victoria del bloque de la derecha es lo que verdaderamente va a pasar. La derecha no va a gobernar sencillamente porque aunque la izquierda aparenta ir dividida, los votos del PSOE son siempre mayores de lo que vaticinan las encuestas, lo cual le permitirá a Sánchez seguir traicionando y despellejando a España hasta el 2023 como mínimo. Otra cosa diferente sería que Casado y Rivera se uniesen como ya hablé hace poco como "España Suma", pero por algo Rivera ya ha anunciado por activa y por pasiva que Ciudadanos no va a ir en coalición con los populares. Según él, porque "Quiere sumar diputados, no imputados". Supongo que a Riveleta se le ha olvidado que con los escaños que él obtiene no gana diputados, sino transfugas.
En definitiva, tenemos ante nosotros un escenario aterrador en el que no se atisba nada bueno en el horizonte. Hace unos días comenté que no creía que la reacción a la sentencia del proces fuese a tener mucha repercusión, más allá de los cuatro tipejos que pudiesen dar la nota quemando contenedores o cortando el tráfico. Hoy, tras conocer estos días la noticia de la vía terrorista del CDR desconozco por completo lo que pueda ocurrir. Sabía que este escenario tarde o temprano se produciría, y lo sabía desde que Rajoy todavía estaba en la Moncloa. Ahora, una vez que se ha confirmado este nuevo y desgarrador escenario, sumado a lo que pueda ocurrir en octubre con la sentencia del proces y la posibilidad de que Franco sea exhumado para calentar la campaña y provocar una reacción que despierte el entusiasmo de la izquierda por ir a votar y resucitar el fantasma de "Las dos Españas" de aquí a las elecciones, creo que nos vamos a encontrar con un otoño bastante caliente en lo político, pero sobre todo, y esto es lo preocupante, en lo social. Personalmente creo que urge echar cuanto antes a Sánchez, el cual ya se ha confirmado definitivamente como un peligro para el país, pero la división de la derecha hará imposible que esto suceda, por lo cual creo que tras el 10-N nos vamos a encontrar con un Sánchez fortalecido, aunque suba pocos escaños, y decidido a seguir gobernando con quien sea y como sea, aunque eso suponga llevarse al país por delante. A eso está dispuesto y a eso nos va a conducir de forma imparable con tal de seguir en el poder.