22 de mayo de 2011, elecciones autonómicas y municipales, el PSOE sufre su peor derrota desde la instauración del Régimen del 78 y pierde todo el poder autonómico y municipal en España, los españoles otorgan al PP la mayor victoria electoral de su historia. José Luis Rodríguez Zapatero, presidente del gobierno y secretario general del PSOE, comparece esa misma noche para reconocer los malísimos resultados de las urnas. Los días siguientes suponen un verdadero quebradero de cabeza para el entonces líder socialista, los barones del PSOE liderados por Patxi López se sublevan contra él para que abandone "Ipso facto" la secretaría general del socialismo español. Solamente la renuncia de Carme Chacón a suceder a Zapatero y la rápida proclamación como candidato a las elecciones generales de Alfredo Pérez Rubalcaba abortan el golpe de estado interno contra Zapatero. Dos meses después, Zapatero comparece en rueda de prensa y anuncia la convocatoria de elecciones anticipadas para el 20 de noviembre de 2011, fecha en la que el PSOE pierde las elecciones generales de forma estrepitosa frente al PP de Mariano Rajoy con el peor resultado electoral en 30 años.
24 de mayo de 2015, elecciones autonómicas y municipales, el PP pierde las mayorías absolutas y sufre la mayor perdida de poder territorial y municipal desde la instauración del Régimen del 78 gracias al frente de izquierdas que le arrebatan todo el poder que los españoles les habían conferido cuatro años antes. Mariano Rajoy, presidente del gobierno y presidente del PP, tarda cerca de 24 horas en comparecer para analizar los malísimos resultados de las urnas. Por contra de lo sucedido, Rajoy anuncia que el PP ha ganado "incuestionablemente" las elecciones y anuncia también que no se va a producir ningún cambio ni en la estructura del PP ni en la del gobierno de España, para más INRI, anuncia que él volverá a ser el candidato a la Moncloa. Un día después, el presidente de Castilla y León lidera una corriente crítica dentro del PP levantando la voz y cuestionando la reelección de Rajoy como presidente del gobierno. Esta afirmación viene acompañada de diversas dimisiones de los barones del PP tras haber sufrido la hecatombe más grande que se recuerda en la historia de la formación conservadora en 30 años.
Cuatro años y dos días separan estas dos historias, la historia de una izquierda que traicionó a sus votantes y a sus principios y pagó (Y siguen pagando) el precio que se merecían ante sus votantes y los españoles, y la historia de una derecha que traicionó también a sus votantes y a sus principios y ahora paga (Y seguirán pagando) el precio que se merecen ante sus votantes y los españoles.
Lo ocurrido el domingo solamente tiene una explicación aunque el PP se pregunte cuál es el motivo por el que los españoles les han castigado tan duramente. Los españoles han dicho "Hasta aquí hemos llegado" y han dado un castigo sin precedentes al PP por la dura política que lleva aplicando desde hace 3 años y medio contra la clase media española. No se podía consentir que Mariano Rajoy se llevase una victoria en estas elecciones tras haber masacrado a los trabajadores y a las PYMES, haber recortado sin piedad alguna en cuestiones tan esenciales para la vida de los seres humanos como son la sanidad y la educación, entre otros muchos recortes sociales, tras haber amparado la corrupción como nadie en este país y verse él mismo salpicado en primera línea en un caso tan repugnante como es el caso Bárcenas (El mismo al que el propio Rajoy mandaba SMS de apoyo y le prometía que desde el gobierno hacían lo que podían para evitarle males mayores con la justicia), tras haber amparado y permitido la secesión en Cataluña y con ello la ruptura de España, tras subir los impuestos como ningún gobierno en España ha hecho hasta la fecha, y tras romper el programa electoral antes de cumplir una semana de gobierno en diciembre de 2011. La derrota del PP y de Rajoy es justa, así como también será justa la derrota que previsiblemente se llevará Mariano y compañía en las generales de noviembre/diciembre/enero o cuando coño las quiera convocar el señor presidente del gobierno. Por mucho que quiera retrasarlas no va a encontrar salvación alguna ante la hecatombe que les espera en las generales dentro de unos meses. Solamente lo sentiré por la vuelta al poder del PSOE, que con el apoyo de Podemos (Ahora el bipartidismo es cuatripartidismo) terminará por enterrar lo que quede de esta España agonizante cuyo trabajo comenzó con muchas ganas José Luis Rodríguez Zapatero, continuó con más entusiasmo y dureza Mariano Rajoy, y concluirá con Pedro Sánchez en los próximos cuatro años como nuevo presidente del gobierno. De nada sirve que Rajoy anuncie que se presenta o anuncie su retirada, este señor es ya un cadáver político al igual que lo era su antecesor ZP después de perder las autonómicas y municipales de 2011. La situación es exactamente igual que hace cuatro años pero a la inversa, la vuelta de la izquierda en España es inminente y ni Aznar presentándose como candidato puede salvar al PP de la hostia definitiva (Rita Barberá dixit) que les espera a los conservadores dentro de unos meses y que les llevará por fin y espero que por muchísimo tiempo al lugar del que nunca debieron salir, la oposición.
miércoles, 27 de mayo de 2015
martes, 5 de mayo de 2015
Sin salida
Como dijo Cicerón, "¿Hasta cuándo, Catilina, abusarás de nuestra paciencia?". Esa es la expresión que mejor nos define en la situación en la que nos encontramos. Cuando los españoles estábamos hasta las narices de aguantar al maldito bipartidismo formado por PPSOE y confiábamos en que un nuevo partido nos sacara de la vergonzosa situación en la que se encuentra sumida España desde hace años, nos encontramos con que las dos fuerzas políticas que representan la "regeneración" en nuestro país; Podemos y Ciudadanos, han ido a toda velocidad en busca del bipartidismo agonizante con el fin de sustentar en los gobiernos de esta España moribunda a dichos partidos con el pretexto de "alcanzar acuerdos en pos del beneficio social y económico de nuestro país y la lucha contra la corrupción". Cómo nos la han metido doblada, señores. La situación que se está viviendo en estos instantes en Andalucía, donde Ciudadanos va a dar su apoyo de investidura a Susanita con su ratón, la posibilidad, cada vez más probable, de que Podemos otorgue su apoyo al PSOE después de las autonómicas y municipales en gran parte de las CCAA y ayuntamientos de España, así como el más que posible apoyo de Ciudadanos tanto a PP como a PSOE en gobiernos locales y autonómicos después del 24-M, demuestra que el mejor aliado del bipartidismo que tanto daño ha causado a la sociedad española durante estos 40 años es, ni más ni menos, que las dos fuerzas políticas que se presentan a la sociedad como alternativa a los partidos tradicionales. ¿Cómo se explica ésto? Pues de una manera muy sencilla; España no podía permitirse el lujo de tener un partido que desee acabar con el Sistema de 1978, con la Constitución, con el bipartidismo imperante, ni con el modelo de Estado (La monarquía), ¿Qué había que hacer? Por la izquierda, crear un partido liderado por jóvenes profesores de una universidad pública española, que tuviesen la labia suficiente como para camelarse el voto de gran parte del electorado español, prometiendo el oro y el moro (Incluido el cambio de Sistema). Una vez que los profesores cumplen su guión y se llevan al bolsillo cerca de un 30% de votos y el primer puesto en las encuestas electorales, los líderes del partido comienzan a moderar su discurso, poco a poco, sin prisas pero sin pausas, poquito a poco, hasta que ese partido pasa de ser un partido que tiene como principio el cambio de Sistema a proponer "retoques" en ese Sistema sin mover sus cimientos, todo queda, por consiguiente, en casa, y así no se produce por parte de la izquierda el nacimiento de ningún movimiento sospechoso que pueda hacer saltar por los aires el R-78. Por la derecha, se resucita un partido que lleva cerca de 10 años en el parlamento catalán haciendo frente al independentismo de CIU/ERC, se eleva a los altares este partido haciéndolo parecer a ojos de la sociedad como un partido nuevo, puro, limpio, sin casos de corrupción y con la "misión divina" de regenerar España frente al nuevo partido de la izquierda que busca, según los medios, de convertir España en una dictadura tipo Cuba/Venezuela. El partido inmaculado de corrupción (Qué en realidad no es tan inmaculado) sale en los medios día sí y día también con la idea de reformar el Sistema pero no cambiarlo, de ordenar los muebles pero no tirarlos por la ventana, de hacer limpieza en casa pero no limpiar lo que hay debajo de las alfombras. Una vez calado ese mensaje en las mentes de los electores, el partido en cuestión va soltando poco a poco frases tipo "Bueno, nosotros somos moderados y estamos dispuestos a pactar con todo el mundo", paso a paso, la idea de llegar a pactos incluso con los que han saqueado a la clase media española, comienza a sonar bien en los oídos de los electores a la vez que el nuevo partido hace gestos cada vez más "cariñosos" hacia los partidos tradicionales. De esta forma, también se consigue que no surga en España un partido desde el espectro ideológico de la derecha con el fin de acabar con el Sistema. Esta es, señoras y señores, la manera en la que se puede destruir cualquier posibilidad de cambio en nuestro país, sólo así se puede mantener un Sistema corrompido hasta las entrañas y seguir vivo por muchos años más a la vez que la sociedad continúa inexorablemente su camino hacia la pobreza. ¿Qué posibilidad hay de cambio? Ninguna, si el español de clase media consideraba que votando a las dos formaciones "regeneradoras" está votando el cambio, se equivoca. Los españoles no tenemos NINGUNA salida, estamos condenados a escoger entre votar directamente al cáncer que nos ha destruido durante 40 años, o por el contrario, votar a los que se presentan con el disfraz del cambio mientras que posteriormente otorgarán tu voto de manera indirecta hacia ese cáncer con el fin de conseguir ellos algo a cambio aunque éstos insistan en que no obtienen ningún rédito por el apoyo que le conceden al tumor que protegen. Si pudiera sentir la sensación que tengo solo es comparable a la de un prisionero que se encuentra encerrado en una cárcel de la que desea salir pero las cuatro paredes que
lo rodean impiden su liberación. Esa cárcel se llama Régimen del 78, las cuatro paredes se llaman PP, PSOE, Ciudadanos y Podemos, y la salida que jamás tendré se llama Democracia.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)